martes, 24 de febrero de 2015

SEGUNDO PUERTO (Patricia Suárez)

Práctica en clase (alumnos de sexto semestre Metodología de Investigación)
Utilicé el ejercicio que la doctora Ethel hizo con Karla. Lo probé con los alumnos de sexto, a quienes les doy Metodología de Investigación. Estamos haciendo comprensión de lectura de artículos de revistas. Elegí uno que me gusta mucho y que ya he trabajado con otros grupos, “El cerebro en llamas y el paso del tiempo” de José Gordon. Es un artículo muy interesante porque mezcla maravillosamente, la ciencia, las anécdotas personales del autor y finalmente hace reflexionar al lector. Leímos en voz alta el texto (un alumno por párrafo). Una vez que terminamos les pregunté de qué había tratado y me dijeron que de un experimento científico en el que se mostraba el efecto “bicho raro” en el cerebro.
Mientras pensaba en el pretexto perfecto para hacer salir a un alumno llegó uno de ellos, muy tarde por cierto. Tímidamente pidió permiso para entrar y le dije que podía hacerlo, pero no sin antes decirme qué había visto en su camino desde la puerta de la entrada hasta el salón. Él comenzó la descripción y al final admitió que solo había visto como un 20 por ciento. Volví a enviarlo y cuando regresó, le pregunté quién estaba en la dirección. Respondió bien, así que le pregunté qué traía puesto la secretaria académica (maestra Reyna). Luego de que la describió, le pedí a la maestra que viniera y fuimos revisando prenda por prenda.
Finalmente, les dije que así estábamos acostumbrados a leer y a vivir (de hecho el artículo también hablaba un poco de esto), que no observábamos lo que ya nos parecía cotidiano y que pasábamos de largo por el mundo. Volvimos a leer el artículo y entonces vieron mucho más de lo que habían visto. Ya me hablaron del ejemplo que dio el autor en el que hablaba de algo que le había pasado, de los datos personales del científico al que mencionaba. Pero todavía necesitamos otra lectura para que me hablaran de la reflexión final que el autor dirigía al lector.
Luego de hablar de todo lo que habían visto en el texto, les pedí que ahora sí buscáramos ideas principales y secundarias, ya como actividad de la clase. El resultado fue mucho mejor que en una ocasión anterior en que lo había intentado. Ellos deben hacer una investigación documental para esta materia, por lo que deberán leer mucho y elaborar fichas de resumen, de citas textuales, de paráfrasis, de comentarios, etcétera. Entonces llegamos juntos a varios puntos que les servirán a lo largo de su trabajo (y de su vida, ¿por qué no?).
1)              Hay que disponer de bastante tiempo para leer, para disfrutar y detenerse en los detalles.
2)              Habrá que leer por lo menos dos o tres veces el mismo artículo para entender cada vez mejor. NUNCA será suficiente una sola lectura. 
3)              No pueden quedarse con dudas acerca de vocabulario ni de datos históricos o científicos. Una sola lectura los llevará a varias búsquedas complementarias.
4)              Hay que disfrutar de cada palabra y de cada anécdota que escriba el autor, pues no son gratuitas y las puso ahí PARA algo.    
Fue una muy grata experiencia porque vi en los alumnos una cierta emoción por haber entendido. Es un grupo al que han tipificado porque siempre salen mal en las pruebas ENLACE de comprensión de lectura. Quizá nosotros, como maestros no habíamos encontrado la manera de ayudarlos a entender.

Les dejo el enlace del artículo, porque para bachillerato lo que escribe José Gordon siempre es una maravilla, y a los alumnos les encanta. http://www.revistadelauniversidad.unam.mx/articulo.php?publicacion=9&art=86&sec=Columnistas

1 comentario:

  1. Volver a ver, volver a leer, revisar con detenimiento, nos da otra perspectiva. Solemos leer sin detenernos en los detalles. Hay un dicho que dice que "el diablo está en los detalles". El enigma, la clave, la trampa, puede estar en un detalle que no vemos con facilidad.

    ResponderEliminar