miércoles, 24 de octubre de 2012

El CLIC:
YO TAMBIÉN... IGUAL QUE YO.. IGUAL QUE A MÍ... 


Así vamos a llamar a este elemento más que forma la "caja negra" del cuento infantil.
Alguno de los personajes tiene que vivir algo, estar en una situación tal, o enfrentarse a equis asunto, que el lector pueda decir: 

¡Yo también siento lo mismo!
¡Piensa o actúa igual que yo!
¡Le pasa igual que a mí!

Y sus derivados...

El CLIC es, pues, ese "clic" que hace nuestro corazón cuando, finalmente o inesperadamente hace clic. Y ya en serio, es cuando siente el clic de conexión entre lector y personaje: se vuelven uno solo. El lector pasa a ser el personaje, a vivir dentro del cuento, a experimentar la ficción. Y el personaje se introduce en el lector, para compartirle sus vivencias, enseñarle sus trucos, responder sus preguntas.
Entrambos, tejen ese remate perfecto que necesita el texto para consolidarse una vez fuera de las manos del autor.
Y tan, tan.
Con clic, clic.

A construir clics, se ha dicho. Claro, para eso tienes que bucear en el alma infantil, que no es otra cosa que el alma auténtica de cada uno de nosotros, ésa que se mantiene viva muy adentro y a la que casi nunca visitamos. Vuelve a meterte en la tuya, que es tu mejor trabajo de campo. Y si puedes, observa sin prejuicio a las que te rodean.



domingo, 21 de octubre de 2012




Compañeros, aquí esta el acceso para el articulo: El cuento infantil: una experiencia de lenguaje integral.

Saludos.
Magdalena Espinoza 


http://revista.iered.org/v1n2/pdf/csandoval.pdf

sábado, 20 de octubre de 2012

¿Escritura de textos, ensayos de principiantes o la única y real literatura infantil?


Joaquín Martínez Miramontes
Resulta curioso llamar literatura infantil  a los escritos elaborados por hombres barbados y colmilludas mujeres, cuya producción puede calificarse de lo que sea menos de infantil, por más que se dirija a niños. En sentido estricto, sólo a ellos, los niños, corresponde generar una literatura, un teatro o una actitud de tal naturaleza. Es lo propio de su edad. (Hiriart 2004, p 21)
Maravilloso inicio de ensayo de Hiriart, sin embargo, en el desarrollo me decepciona cuando dice que:
 “Resulta útil diferenciar los textos infantiles de la creación literaria dirigida a los niños, tal como hacemos con la pediatría y la medicina infantil, a fin de no confundir el ejercicio medico con el juego al doctor de unos chiquillos”. (Hiriart, 2004, p. 22)
Sin embargo Krauze (2012) plantea que “…todo mundo tiene la capacidad de ejercer la creación literaria, pues cada persona cuenta con las herramientas tanto físicas como cognitivas y lingüísticas para lograrlo.”
Nos hemos creído tanto el mito de que sólo las personas con un don especial pueden escribir que es natural que desconfiemos de cualquier creación, es necesario replantear nuestras concepciones y analizar los textos a fin de que pierdan esa cerradura hermética, y podamos convertirlos en objetos de investigación, en palabras de Sagarzu “Con Todorov el texto pierde esa condición de misteriosa caja negra para iniciados: es un objeto de investigación, contiene experiencias conocibles y puede estudiarse como parte de la realidad humana.”
Los invito compañeros a realizar un análisis literario de este cuento y juntos poder arribar a conclusiones que den respuesta a las siguientes preguntas ¿Pueden los niños escribir literatura o sólo son ejercicios de principiantes como menciona Hiriart?
Vueltas de tuerca, bumerán, talisman, recursos literarios, imaginación y lo mejor de todo ningún rasgo de finalidad moralizante. Es lo que encuentro en este texto. 

El venado de colores[1]

Jitzel Diana Guzmán Barrera[2]

Erase una vez un venado diferente a todos. Era muy blanco, era hermoso, lucía mucho su hermosura, vivía de su hermosura.
Un día salió al desierto y se perdió, él dijo:
—Estoy soñando, me dormiré y cuando despierte estaré en el bosque de nuevo.
De repente en su sueño salía un bosque que decía:
—Corre, corre el mundo explota por ti, está explotando ya, despierta.
Despertó y empezó a correr como loco, pero no se dio cuenta que sólo daba vueltas, se mareó y se cayó, despertó y encontró botes de pintura, diferentes pintura, pensó y dijo:
—Ya se cual va ha ser mi trabajo, pintarme.
Se pintó de colores, pero no sabía que no había agua. Todo el público le aplaudía. El público le empezó a dar dinero y el dijo:
—No, muchas gracias, prefiero que me den agua, comida y techo.
El público dijo:
—No tenemos agua ni comida, pero techo sí.
Se encendió mucho y estaba a punto de patear a  un niño armadillo, corrió la mamá y alcanzó al niño, el venado dio la patiza al aire.
—¿Cómo me limpiaré? —se preguntaba.
La mamá del niño pensó en hacerle una trampa, le dijo:
—Sígueme venado, tengo techo, agua y comida.
La siguió y al llegar lo encerró en una jaula, él le dijo a la mamá armadilla:
—¿A poco esto es un elevador?
La mamá armadilla se rió y le contestó:
—Si, te llevará directo a tu cuarto.
El venado empezó a cantar:
El elevador sube y baja.
Y continuó cantando, hasta que se dio cuenta de que no llegaba y gritó:
—¡Auxilio, ayúdenme por favor!
Empezó a temblar la tierra y el venado dijo:
—Ay, a poco me quieren mucho que ya me vienen a traer, —continuó gritando—, ¡Apúrate Coco te estoy esperando.
De repente se dio cuenta que sólo era la tierra.
Un águila fue y le abrió la puerta.
—Gracias, —le dijo.
La tierra dejo de temblar, el águila le dijo:
—Yo te puedo enseñar el camino hacia el bosque.
Cuando se lo iba a enseñar la mató otra águila. El venado le preguntó:
—¿Por qué la matas?
El águila asesina, voló y no respondió. El venado gritó:
—¡Mataron a mi amiga!
Un sapo escucho y llevó flores al velorio, el venado le preguntó:
—¿Qué debo hacer para quitarme estos colores e irme al bosque?
—Primero busca un huevo de codorniz, después córtate un cabellito de cada color y préndelos, no te preocupes yo te puedo dar la caja de cerillos.
El venado fue de inmediato a buscar el huevo y lo halló, se cortó los cabellos y los prendió, pero no funcionó. Alcanzó al sapo y le dijo:
—¿Qué hago?
El sapo se empezó a reír, y le dijo:
—Sólo te dije esto para ver si lo hacías, pero yo te puedo llevar al bosque.
Se fueron los dos al bosque. Llegaron y el venado corrió a mojarse. Se le borraron los colores y le dio las gracias al sapo y se hicieron amigos. 

Fuentes de información

HIRIART, Bertha, Escribir para niñas y niños, Paidós Croma, México, 2004.

KRAUZE, Ethel, Desnudando a la musa, Conaculta, México, 2012.

SAGARZAZU, Maria,  Todorov y la filosofía de la crítica literaria, documento consultado en línea 2012, disponible en: http://folk.uio.no/jmaria/lund/2004/textos/pdf/04sagarzazutodorov.pdf



[1] Trascripción del original, escrito a lápiz, en el taller de escritura “Letras mágicas”, se incorporó puntuación y la escritura correcta de las palabras, no se cambió ninguna palabra del texto original ni se insertó ninguna inexistente.
[2] Alumna del 5° grupo A de la Escuela Primaria Profr. Francisco Figueroa, de la comunidad de San Juan Unión Guerrero.

jueves, 18 de octubre de 2012

Entre monederos y merjurjes… primeras aproximaciones al cuento infantil


Aprender a soltar la muñeca, en la escuela adquiere distintos significados; desde realizar trazos para mejorar la psicomotricidad, plasmar nuestro pensamiento para cumplir con distintas funciones, o jugar con la creatividad y crear universos imaginarios. Soltar la muñeca, en este texto lo entenderemos como la capacidad de crear textos literarios, es decir, ir más allá de escribir los textos funcionales y dar un salto hacía la creación literaria.

Lo anterior no es fácil, porque desafortunadamente, durante muchos años la escuela primaria se ha enfocado en aspectos superficiales de la escritura, principalmente en la ortografía, situación que más que facilitar el proceso creador, lo dificulta. No estoy diciendo que la ortografía no sea importante, sino que conocemos que la escritura es una prácticas social que se adquieren por interacción, entonces lo que debemos hacer es buscar que el estudiante interactué de forma natural, al hacerlo irá mejorando poco a poco.

De acuerdo con Krauze (2011) “La creación literaria no es algo extraevolutivo, un plus de algunos señalados, sino la resultante de la interacción con la lengua...”, por ello, para promover la interacción inicié con la creación de un taller de escritura creativa en el que participan los niños y niñas  que integran el quinto grado  de la Escuela Primaria Rural Estatal Profr. Francisco Figueroa de la comunidad de San Juan Unión, Municipio de Taxco de Alarcón, Guerrero.

Para poner un poco a prueba la hipótesis de que el escritor se puede formar en espacios que potenciar su creatividad, les pedí a los niños y niñas que escribieran un cuento a partir de un objeto designado. El objeto que le tocó a Yanira  fue un monedero, en esta primera aproximación a la escritura de cuentos, sólo les pedí que escribieran un cuento, sin dar mayores explicaciones. El texto que logró es el  siguiente:
Cuadro 1: El mundo de los monederos[1]
Trascripción
El mundo de los monederos
Había una vez un monedero rico, rico, pero riquísimo que cuando un monedero no tenía dinero le iba a pedir dinero al que tenía le daba e iba otro y le pidió dinero para unas botas, e iba otro para unos panes e iba otro para unos aretes e iba otro para unos cocos e iba otro y le pedía para unos pupilentes e iba otro y le pedía para un abecedario porque no sabía e iba otro para una jarra e iba otro para unas plantas e iba otro para una muñeca e iba otro y le pedía para un pizarrón y hasta que un día les pidió su dinero a los que les había dado y los monederos dijeron: Ay tú.
                                                        Yanira Cano Barrera

Una sesión después les propuse escribir un cuento del mismo objeto siguiendo las  Variaciones para escribir un cuento infantil: con puntitos, cositas y unas cuantas palabras, de la Dra. Krauze que a continuación escribo:

·         Elegir un “objeto-personaje” (un caracol, un duende, un niño pelirrojo, una cucharita de plata, etc.)

·         ¿Dónde vive?

·         ¿A qué se dedica?

·         ¿Qué le acaba de pasar?

·         ¿A quién (segundo “objeto-personaje” con algún tipo de poder que el primero no tiene) le pide ayuda?

·         Petición de ayuda (diálogo)

·         ¿Qué tipo de ayuda le da B a A?

·         ¿Qué hace A con esa ayuda? (¿cómo se transforma el mundo o “su mundo”?)
Siguiendo las indicaciones Yanira escribió el siguiente cuento:
Cuadro 2: El monedero
Transcripción
El monedero
Había una vez un monedero, negro con manchas amarillas y rojas y por supuesto con manchas azules y era alto. Vive con una niña donde vivía era una casa de lujo de 3 pisos él comía, jugaba, reía, y bailaba él vive en el 2 piso era adornado de flores y corazones y estrellas y también con globos.
Se dedica a dormir, a comer, a jugar, a reír, a bailar, y a ser chef.
Un día tan hermoso mientras que la niña se iba a estudiar el monedero iba caminando cuando le arrebataron su dinero y su credencial.
—¡Ayúdame por favor hada madrina!
—¡Esta bien te ayudaré qué te pasó?
—¡Me acaban de robar mi dinero y mi credencial!
—¡Quién te lo robo dime quién y te ayudo pero tienes que decirme!
—Me robaron esos que van ahí adelante que no puede pasar porque hay muchos carros y no pueden pasar con su carro puedes ayudarme con tu magia para que me regresen mi dinero y mi credencial!
La hada madrina le ayudó a recuperar su dinero y por supuesto su credencial le ayudó con todo lo que se le perdió le ayudó con su dinero y le dijo un secreto que cuando fuera pasando alguien le diera con el puño o con el brazo o que dijera aunnnn aunnnn y que se hincara también le dio una receta para que no le robaran le dijo debes llevar varas de palo amargo y cacho de sábila la espina de un huamúchil y una botella de rancho lo mueles en la licuadora en vez de agua le echas la botella de rancho escondido.
Y el monedero iba caminando cuando otra vez  le querían robar pero el monedero hizo la receta que le había dado el hada madrina iba corriendo el perro le iba a quitar  el dinero al monedero y el monedero le aventó la receta que se convirtió en un licuado de cosas feas se lo aventó en los ojos y en la piel y se le cayó el pelo al perro y el gato se echo a correr y el perro le dijo al monedero ya no te voy a molestar y el monedero con la niña vivieron felices por siempre.
 Yanira Cano Barrera
En el primer texto, Yanira utiliza como materia prima lo que ve que ocurre en la vida diaria, “Un monedero rico, rico, rico”, al que todos le piden prestado para satisfacer sus necesidades básicas.  En el segundo texto, siguiendo las “variaciones para escribir un cuento” logra concretar una mejor estructura.
Definitivamente del primer texto, al segundo, hay un gran avance y aunque parezca muy apresurado, me aventuro a creer que la habilidad de escribir definitivamente se puede potenciar por medio de estrategias didácticas que poco a poco acerquen a los estudiantes a producir textos literarios.
¿Qué elementos del cuento infantil observan? ¿Qué hace literario a éste texto? ¿Será posible que los niños y las niñas suelten la muñeca y escriban literatura?
Preguntas que por lo pronto, quedan flotando en el aire y nos obligan a regresar al trabajo de  campo y a continuar indagando en bibliografía que sustente nuestro quehacer como promotores de la escritura en la escuela primaria.
 Joaquín Martínez Miramontes
Bibliografia
KRAUZE, Ethel, Desnudando a la musa, Conaculta, México, 2012.
FERREIRO, E. Y SIRO, A., Narrar por escrito desde un personaje. Acercamiento de los niños a lo literario. Buenos Aires: Fondo de Cultura Economica, 2008.


[1] Emilia Ferreiro (2008) sugiere que los textos de los niños sean transcritos en dos niveles para ser analizados: nivel gráfico y morfosintáctico-semántico. En los que presento tomé en cuenta el segundo aspecto, realizando las siguientes correcciones:
a) Coloqué mayúsculas al inicio de los párrafos.
c) Se restableció la ortografía de palabras.
d) Se respetaron las palabras que estaban y no se introdujo ninguna inexistente.
e) Se respeto la puntuación original de los textos.
Todo lo anterior con el propósito de facilitar la lectura de los textos.
 

miércoles, 10 de octubre de 2012

Joaquín, profesor de quinto año de primaria en San Juan, Guerrero, nos comparte dos cuentos de Yanira Casimiro Barrera:

El personaje: un monedero.
El primer texto, sin guía.
El segundo, siguiendo el modelo de "variaciones para escribir".

Promete subirlos.
Mientras tanto:
En el primero, el monedero es riquísimo y los demás monederos le piden dinero, que para el pan, para una muñeca, para un pizarrón; luego ya ninguno le quiere pagar.

En el segundo, el monedero vive una aventura turbulenta con maleantes, hada madrina, tráfico, un perro ladrón al que se le cae el pelo luego de recibir una receta horripilante contra bandidos, y hasta un gato... 

Comentamos: el monedero es un microcosmos para esta niña de diez años, de la sociedad actual que la rodea. Un poco, como si fuera una especie de "talismán" que encierra las cien novelas de "La comedia humana" de Balzac. 

¿Será posible que en el cuento infantil  -en todos los cuentos infantiles- se encuentre siempre esa especie de "llave" (¡la caja negra!) del microcosmos de toda una sociedad, una época, una historia común?

Oritia dice: ¿cuál sería la diferencia entre "cuento infantil" escrito por niños, como éste, y los "creados" por adultos como cuentos infantiles?

Emilia dice: mis estudiantes de licenciatura lo escribieron con maleantes y narcos...  para niños.

Vamos a comparar el de Yanira con éstos. Sacaremos conclusiones. 
Le pido a Emilia que busque: ¿hay un elemento equivalente al monedero en alguno de estos cuentos? 
SUSPENSO... CHICOS, CHICAS, NIÑOS, NIÑAS, BEBÉS Y BEBESAS....
(Luego les platico lo del pronombre sueco neutro para la equidad de género)

martes, 9 de octubre de 2012




La literatura infantil es un género literario que cobra cada vez mayor importancia. Esa postura de ninguneo, cosidero, ya es asunto de un pasado muy cuestionable. Actualmente la literartura para niños no necesariamnete tiene ese enfoque pedagógico, sin embargo siendo. Sin embargo, es de gran apoyo. Por ejemplo, en la introducción de El cuento infantil: una experiencia del lenguaje integral menciona que:
 
El cuento infantil no sólo es importante porque sirve como estímulo para el futuro lector, sino tambien, porque contribuye al desarrollo del lenguaje, de la creación literaria, de la imaginación de mundos posibles, entre otros. Además, porque al recrear la vida de los personajes e identificarse con ello, le permite vivir una serie de experiencias y situaciones que le ayudan a adquirir mayor seguridad en sí mismo, a integrarse y formar parte del mundo. [Sandoval, 2005, 1]
 
 
           Pueden consultar el articulo completo en: